¿Se han hecho esta pregunta? Y es que nunca nadie está preparado para hablar de este tema con los más pequeños de casa.
Los psicólogos recomiendan comunicar de forma clara a los niños la muerte de un progenitor u otros familiares, amigos o personas cercanas.
Sí o sí la palabra muerte debe aparecer en el diálogo entre el adulto y el niño. Incluso debe decirse a un bebé, aunque éste no entienda todavía qué significa.
Uno de los momentos más duros para un niño es afrontar la muerte de un progenitor y la forma como los adultos le comunican ese trance condicionará los comportamientos y reacciones que pueda experimentar en un futuro. Aunque cada familia es diferente y algunas tienden a presentar un mundo edulcorado a los niños, los expertos en duelo infantil aconsejan no engañar al pequeño, ofrecerle un mensaje claro y corto y no obviar nunca la palabra muerte.